Shinkansen 101
“Que la plata se mueva a la velocidad de internet”, fueron las palabras de Leo Soto (CEO y co-founder de Shinkansen) para describirme la misión de la empresa en el primer correo que intercambiamos. Soy relativamente nuevo en el campo de tecnología y ha sido bonito descubrir la generosidad que existe entre las personas que trabajan en el rubro. Es obra de esa generosidad y de la casualidad que conecté con Leo. En el mail, Leo me presentaba su intrigante elevator pitch y me invitaba a unirme al equipo.
Como buen ciudadano del internet, me aventuré en el rabbit-hole de averiguar más sobre el equipo y sobre la tecnología concurrente, escalable y fault-tolerant que utilizaban (y que representaba un desafío nuevo que tendría que aprender bajo la marcha). Hay pocas cosas más bonitas que una solución elegante para un problema difícil, y eso era exactamente lo que encontré en la propuesta de Shinkansen. Luego de un calmado y casual correo de respuesta que iba en las líneas de “SI QUE SI!” y tras unas entrevistas y un examen técnico, recibí las muy bonitas noticias de haber quedar seleccionado en el rol de Product Developer.
El job title representaba terreno un tanto desconocido para mí y ha resultado ser una mezcla tan extraña como bacán. En un sentido bastante literal, se trata de desarrollar el producto y sacar adelante los cambios (técnicos, estratégicos, de contenido, etc.) necesarios y que hacen sentido en el contexto del negocio. Bueno, al menos esa es mi interpretación hasta ahora: un pie en ingeniería, uno en producto, y a veces un poquito de zapateo africano en donde se necesite. Seguiré reportando, zapateo y todo.
Van tres semanas desde que me uní al Shinkansen-squad (sí, obvio que voy a mandar a hacer camisetas), que suena poco pero no lo es tanto en el contexto de una early startup, donde las cosas se mueven y se mueven rápido. En este tiempo he tenido la oportunidad de familiarizarme con algunos de los componentes que comprenden la sofisticada maquinita que articulan la magia detrás de Shinkansen, y mandado mis primeros cambios a producción. También construí la nueva página de landing, que prepara el terreno para todas las cosas que se vienen en el roadmap, y sobre todo ahora que acabamos de finalizar una ronda financiamiento con aliados tan super poderosos como ALLVP, Chile Ventures y Salkantay.
Y mientras tanto, dejo un shameless plug para que vayan y visiten nuestra nueva landing 😊. Fun fact: aprendí a hacer ilustraciones vectoriales haciendo la imagen que sale al inicio. Dibujarla me hizo reflexionar sobre lo bonita que es la metáfora de nuestro nombre: Shinkansen es el tren bala japonés y representa un cambio de paradigmas. Al igual que los viejos trenes de carbón, la infraestructura bancaria actual es un mecanismo lamentablemente anticuado, congelado en su propio tiempo y espacio… Y Shinkansen es un esfuerzo de ingeniería para construir nuevos rieles, integrarlos con la infraestructura actual, y crear nuevas y mejores conexiones.
Y con un tren bala, gana todo Latam.